José Bello *
Las negociaciones del gobierno de Donald Trump con los talibanes
en Qatar durante más de un año, que culminaron con la retirada de las tropas
estadounidenses y OTAN de Afganistán y cuya implementación ha sido aplicada por
la actual administración demócrata dirigida por el presidente demócrata Joe
Biden, es tan empedradas como el camino del infierno.
Estimo que ese ejército títere afgano organizado y financiado con armamentos y equipos modernos de transporte y comunicaciones por la pasada administración, pienso que sin duda alguna que se generó una relación muy estrecha con Trump y su equipo militar que dirigía en Afganistán tanto estadounidense como afganos y han logrado ejecutar un jugada político militar terriblemente dañina para Biden y su gobierno y partido.
Facilitaron la deserción en masa de las tropas afganas bien entrenadas y equipadas para facilitar el acceso a los talibanes en tiempo récord sin precedentes en la historia y con ello dificultar y desmoralizar la retirada del personal militar, diplomático y administrativo de los EE.UU. y lograr así la trampa político militar del caos migratorio que hoy vive el pueblo afgano y las tropas estadounidenses encharcadas en el aeropuerto de Kabul.
Resulta claro la trampa política interna de Donald Trump
en esta coyuntura muy similar a la que vivió el presidente Jimmy Carter en Irak
cuando Iman Komeini ordenó el asalto a la embajada yankis en Bagdad y los
republicanos maniobraron para dificultar e impedir el rescate de los diplomáticos
y el personal administrativo al presidente James Carter.
*El autor es ingeniero electromecánico y reside en la ciudad de Santa Cruz de Barahona, en el suroeste de la República Dominicana.
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