El Gobierno se defiende con agresiva campaña promoción para acallar críticas Punta Catalina

 


 Reportaje Especial

FREDDY MEDRANO

Editor en jefe

SANTO DOMINGO, República Dominicana. -El Gobierno inició este sábado, a través de sus distintas agencias de comunicación, una intensa e agresiva campaña de promoción de sus principales ejecutorias para frenar la andanada de críticas ante la creación de una ley de fideicomiso que busca diseñar el manejo de las plantas de Punta Catalina.


La campaña se puso primero en marcha a través del vocero de la Presidencia, Homero Figuereo, que con una serie de tuis resalta las bondades de las ejecutorias gubernamentales.


Figuereo, un filosófo y excomentarista de televisión resaltó este sábado las bondades del corredor de transporte de la avenida Núñez de Cáceres, inaugurado hace un año por el presidente Luis Abinader dentro de sus planes de reorganizar el sistema de la movilidad de pasajeros en la capital y el Gran Santo Domingo.


El inicio de esa estrategia se produce horas después de que el presidente Luis Abinader se reuniera con los principales funcionarios y las gobernadoras para evaluar los proyectos de infraestructuras que se desarrollan en todo el país.


La postura del gobierno está dirigida a contrarrestar los ataques virulentos lanzados desde la oposición en torno a la decisión que se quiere adoptar sobre el parque Termoeléctrico de la comunidad de Salinas, Baní.


Roberto Rodríguez Marchena, exvocero de la Presidencia y un estrecho colaborador del expresidente Danilo Medina, fue el primer en lanzar con artillería pesada contra las autoridades eléctricas.


Rodríguez Marcha advirtió que la situación de Punta Catalina podría poner en riesgo la estabilidad financiera del país.


El expresidente Leonel Fernández intervino en las discusiones al reclamar que el gobierno explique con más lujo de detalles las operaciones  de las dos plantas a carbón, que en conjunto están generando más de 750 megavatios.


Con un criterio más técnico, el economista Jaime Aristy Escuder pidió el retiro del fideicomiso del Congreso y que el Gobierno convierta a Punta Catalina en una sociedad anónima.


Como si se aplicara el refrán “afilando el cuchillo para su propia garganta”, el ingeniero Ramón Albuquerque, del oficialista Partido Revolucionario Moderno (PRM) ha sido muy mordaz contra la actuación del gobierno en Punta Catalina.


El expresidente del Senado y exrepresentante por Monte Plata ha dicho que la difícil situación de Punta Catalina, es la conformación del Comité Técnico que dirigirá todo lo relativo a la operación del complejo termoeléctrico.


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